Chechino 2.0 Reloaded
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Theon Lobster
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Re: Chechino 2.0 Reloaded
El bogavante, el bogavante te coge por detras y te coge por delante
Re: Chechino 2.0 Reloaded
Agus.
Volveremos a encontrarnos...quizás en las resplandecientes brumas de la Espada de Orión, quizás en una desierta meseta del Asia prehistórica...quizás en otra forma, en los eones por venir, cuando el sistema solar ya no exista.
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Agus Kerman
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Re: Chechino 2.0 Reloaded
Soy el comunista, cada vez que escribís mi nombre en rojo me hago mas fuerte 
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Agus Kerman
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Theon Lobster
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Re: Chechino 2.0 Reloaded
No entiendo que hacen Made y Agus. 
Edito: creo que se lo que ha pasado.
Edito: creo que se lo que ha pasado.
El bogavante, el bogavante te coge por detras y te coge por delante
Re: Chechino 2.0 Reloaded
Yo no hago nada 
Re: Chechino 2.0 Reloaded
HISTORIA
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TURNO DE DÍA
Tras la trágica desaparición de Gerold Dayne, en un lugar destacado de la entrada del Marder Club colgaron una foto tamaño póster de Pollus y Madelaf de recién casados. Mirad qué guapos estaban, parecían estrellas de cine:
De cara al próximo linchamiento, ya sólo quedaban el rico decadente Theon, la bailarina Lau Bu y el trotskista Agus Kerman.
Dos de estos tres personajes se acercaban, encapuchados, al caer la tarde, al depósito de gas abandonado de la Fichtestrasse:
Entrando por una puerta disimulada en su pared, se adentraron en el edificio industrial medio en ruinas de finales del S.XIX, y a continuación se internaron por un túnel. Abrieron una puerta con una cerradura de combinación y entraron en una estancia colosal, una maravilla tecnológica Steampunk: una sala circular con 3 pisos concéntricos, llena de mapas: de Alemania, del mundo y de los países más importantes. Muchas localizaciones tenían un tubo en el mapa, del que, de cuando en cuando, saltaba un cilindro metálico que era abierto inmediatamente por un operario, que lo trasladaba a su destinatario. Pues esa habitación era el centro de comunicaciones de los Illuminati. El sistema de correo neumático atravesaba toda la corteza terrestre, permitiendo la comunicación casi instantánea a nivel mundial. Originalmente había sido creado por los lamas tibetanos, pero como en los últimos siglos andaban escasos de fondos, habían accedido a compartirlo con otras organizaciones más modernas y adineradas, como los Rosacruces, la Masonería Egipcia o los propios Illuminati, a cambio de que éstos asumieran los costes de conservación, reparación y mejora.
Nuestros dos misteriosos visitantes se dirigieron a un cubículo en la planta superior, reservado a los Illuminati de mayor categoría. Allí tenían privacidad, a la vez que podían contemplar los mapas y dar rienda suelta a su megalomanía. Cerraron la puerta y empezó una interesante conversación. Para no revelar identidades, les llamaremos simplemente “A” y “B”, sin decir quién era quién:
A: — Bueno, pues ya sólo quedamos tres.
B: — Sí, nosotros dos y el inútil ese.
A: — Mira, B. Yo lo he estado pensando y… esto de Verdes y Azules, Pueblo o Individualistas… no es más que es un jueguecito absurdo del Marder Club. En realidad, lo importante es que sobreviva un Illuminati. Lo importante es el Gran Plan.
B: — Ya. Yo estaba pensando que… lo que quiero es sobrevivir yo. No que ganen los Verdes, que estaría bien también, ya que yo por supuesto lo soy pero… ahora mismo, cada uno de los tres tenemos cada uno un tercio de probabilidades de sobrevivir. La gente nos ve como personas egoístas y superficiales, pero tú y yo sabemos que valemos mucho más. Estamos llenos de… ideas, de proyectos. No tendría sentido que sobreviviera… Ese.
A: — Vaya, pensaba que iba a costar más convencerte. Aunque creo que tus motivos son más egoístas que los míos.
B: — Llámalo como quieras. Creo que al final, llegamos al mismo destino por diferentes caminos.
A: — Bien, pues ahora tenemos que pensar cómo deshacernos del tercero y quedar nosotros dos solos. Yo había pensado que bisbis…bisbis…bisbis…
B: — Es un buen plan, pero…. Falta algo. Yo haría también bisbis…bisbis…bisbis…
A: — Muahahaha, qué bien pensado. Y ahora que lo dices... se me acaba de ocurrir que… ¿qué tal si además bisbis…bisbis…bisbis…?
B: — ¡Genial! ¿Tenemos un acuerdo?
A: — ¡Tenemos un acuerdo!
A la noche siguiente, el Marder Club estaba a rebosar.
Los camareros distribuían por las mesas cartones con los colores del semáforo para las votaciones: Rojo para votar por Agus, Amarillo para Lau y Verde para Theon.
Junto al escenario, habían colocado una caja fuerte y un tanque de agua vacío. El MC explicó las reglas del día:
— ¡Señoras y señores, meine Liebe Damen und Herren, Ladies and Gentlemen! ¡Bienvenidos a la Gran Final del Chechino! Hoy, casi con toda seguridad, se resolverá el misterio del Sepulturero. Hoy tenemos dos novedades para el linchamiento: la primera, como no tenemos ya agentes de policía adscritos al caso que puedan entrar en sus domicilios, los tres participantes han accedido a depositar en esta caja fuerte algunos documentos que sirvan como prueba de su identidad, que sólo serán abiertos después de su fallecimiento. La otra novedad: el linchamiento de hoy se hará ¡por inmersión! Vean este magnífico acuario, tiene una capacidad de 1.000 litros de agua. El linchado de hoy será introducido en el tanque, atado de pies y manos, y a continuación rellenaremos el acuario. Así que al menos ¡tendrá una mínima posibilidad de escapar! ¡Ahora, damas y caballeros, llenen esas copas! ¡Arriba el champán! ¡Hagan sus apuestas! El reloj nos indica que el linchamiento empieza en diez minutos. Y ahora, para entretenerles durante esta espera, primero el grupo musical "Comedian Harmonists" les ofrecerá un homenaje por el recientemente fallecido Pollus, y a continuación, nuestra magnífica bailarina y concursante chechinil, Lau Bu, les deleitará con su interpretación de una pieza de danza contemporánea llamada “Metrópolis”, inspirada en la reciente película cinematográfica de gran éxito:
La melodía de la canción de homenaje a Pollus, muchos años después, sería "tomada prestada" por el Premio Nobel de Literatura (pfff) Bob Dylan para su canción-protesta "Hurricane". El estribillo decía así:
This is the story of Mister Gerold Dayne
it won't be over till they clean his name
the press said he would profane
the body of his dead wife Madeleine
but this accusation is just insane
En la mesa número 1, la de mayor preferencia, se sentaban dos amigos de Theon: nuestra vieja conocida “Cory”, y su última conquista amorosa: Augustus von Thyssen Junior, el hijo menor del “Rockefeller del Ruhr”, creador del imperio Thyssen. Augustus era aún más crápula y disoluto que el joven Lobster, por lo que hacía la pareja perfecta de la princesa Corinna y era un gran amigo y compañero de juergas de Theon.
Mientras el público esperaba impaciente, viendo el interludio musical y de danza, unos pesados pasos sonaban en la parte trasera del Marder Club. El vigilante, de la empresa de seguridad privada “Antares Sicherheit GmbH”, se acercó extrañado a donde se oía el ruido.Lo que vió le heló la sangre:
— ¡Pollus! ¡Pero… pero cómo es posible! ¡Si estabas muerto!
— Tranquilo, no ha cambiado nada. Sigo muerto— contestó el interpelado, con una ligera ronquera, como si acabara de volver a hablar después de una prolongada afonía.
El guarda de seguridad se desmayó al oír aquello, lo que probablemente le salvó la vida. Pollus cogió una escalera, sacó su caja de herramientas y empezó a trastear con el mecanismo del gran reloj del escenario principal.
— ¡Muy bien, querido público! Después de este sentido homenaje a Pollus y el magnífico baile a cargo de Lau, ha llegado la hora de comenzar las votaciones. ¿Tienen ya claro quién es el nefando sepulturero? Voten, y voten en conciencia.
La mesa número 1 levantó dos cartones de color rojo. Los amigos de Theon habían emitido los dos primeros votos para condenar al trotskista Agus. Nada sorprendente. Pero… justo cuando sus votos habían sido contabilizados, sonó la campana del gran reloj. El MC se quedó bastante descolocado, consultó su reloj de pulsera y… vaya, parecía que aquello estaba bien.
— ¡Damas y caballeros! Les ofrezco mis más humildes disculpas, en mi nombre y en del Marder Club. La votación ha concluido. Lo siento, pero es así. El campanazo indica que se acaba de cumplir el final de la hora de votación. Así pues, el resultado del escrutinio queda como sigue: Agus Kerman 2, Lau 0, Theon von Lobster 0. Agus Kerman, ¡acaba de ganar usted un buen remojón!
Si aquello hubiese sucedido en cualquier otro país del mundo, habría sido de esperar un motín entre el público. Abucheos, gritos de “Fuera, Fuera…” Pero estamos en Alemania. Si las normas dicen que se ha terminado la votación, y una máquina como un reloj lo avala, pues no hay más que hablar. Sólo algunos tenues murmullos de protesta en algunas mesas indicaban que parte del público no estaba del todo conforme. Pero nadie interpeló al MC. Ni siquiera el perjudicado por la decisión… ya que Theon y Lau le habían tapado la boca al bueno de Agus con sendos esparadrapos en cuanto sonó el reloj.
Los operarios del Marder Club introdujeron a Agus Kerman en el tanque, colgándole cabeza abajo. Ahora tendría su mínima oportunidad de supervivencia si lograba escapar de aquello. Las mangueras y los cubos empezaron a llenar el gran depósito de agua. El trotskista se removía todo lo que podía, pero no lograba soltarse.
El nivel de líquido subía y subía… Agus se debatía desesperadamente, entre los gritos del público que le jaleaba, deseando que el espectáculo durase un poco más. Finalmente, el agua llenó por completo el tanque y a los cuarenta o cincuenta segundos, Agus murió ahogado.
—¡Y bien, damas y caballeros! ¡Ahora llega el momento de la verdad! ¿Habrán acertado ustedes… bueno, al menos, la mesa 1, con el linchamiento? ¡Abramos la caja fuerte! ¿Qué documentos nos ha dejado Agus Kerman como prueba de su rol?
El MC abrió la caja fuerte, extrajo una carpeta de color rojo, leyó rápidamente su contenido, y lo anunció al público:
—¡Bien, señoras y señores, el primer documento que dejó Agus Kerman es una carta, firmada por el dueño de este local, en la que le nombra liberado sindical vitalicio! A cambio, el Sr. Kerman se compromete a desactivar todas las reivindicaciones laborales de los trabajadores del Marder Club que puedan suponer un coste para la empresa, y a crear nuevas reivindicaciones absurdas para reconducir las peticiones sindicales a vías absurdas que no conduzcan más que al desánimo y la desmovilización de los trabajadores.
Vaaale, y el segundo y tercer documentos son carnets a nombre de Agus Kerman de dos organizaciones comunistas: una trotskista y otra ¡estalinista! ¡Quién lo iba a decir! Sí, aquí tiene su carnet de FORRO, “Fortaleza Roja” y aquí el de las Juventudes Estalinistas Trabajadoras de Alemania, “JETAS”.
Por si esto no bastara, hay también una instancia firmada por el propio Agus ante el Ministerio del Interior de Prusia, solicitando cambiar su apellido, del aristrocrático “VON Kerman” a “Kerman a secas”. Vaya, vaya, pues está claro que Agus Kerman era el Charlatán.
¡Damas y caballeros, qué drama, qué emoción! Hoy no ha sido la gran final, sino una semifinal. ¡Un fuerte aplauso para nuestros dos finalistas: Theon von Lobster III y Laaaaau Bu! ¡Quedan todos ustedes emplazados para la finalísima este domingo!
TURNO DE NOCHE
Por primera vez en mucho tiempo, una noche tranquila en el Marder Club. No pasó nada reseñable.
Tras la trágica desaparición de Gerold Dayne, en un lugar destacado de la entrada del Marder Club colgaron una foto tamaño póster de Pollus y Madelaf de recién casados. Mirad qué guapos estaban, parecían estrellas de cine:
De cara al próximo linchamiento, ya sólo quedaban el rico decadente Theon, la bailarina Lau Bu y el trotskista Agus Kerman.
Dos de estos tres personajes se acercaban, encapuchados, al caer la tarde, al depósito de gas abandonado de la Fichtestrasse:
Entrando por una puerta disimulada en su pared, se adentraron en el edificio industrial medio en ruinas de finales del S.XIX, y a continuación se internaron por un túnel. Abrieron una puerta con una cerradura de combinación y entraron en una estancia colosal, una maravilla tecnológica Steampunk: una sala circular con 3 pisos concéntricos, llena de mapas: de Alemania, del mundo y de los países más importantes. Muchas localizaciones tenían un tubo en el mapa, del que, de cuando en cuando, saltaba un cilindro metálico que era abierto inmediatamente por un operario, que lo trasladaba a su destinatario. Pues esa habitación era el centro de comunicaciones de los Illuminati. El sistema de correo neumático atravesaba toda la corteza terrestre, permitiendo la comunicación casi instantánea a nivel mundial. Originalmente había sido creado por los lamas tibetanos, pero como en los últimos siglos andaban escasos de fondos, habían accedido a compartirlo con otras organizaciones más modernas y adineradas, como los Rosacruces, la Masonería Egipcia o los propios Illuminati, a cambio de que éstos asumieran los costes de conservación, reparación y mejora.
Nuestros dos misteriosos visitantes se dirigieron a un cubículo en la planta superior, reservado a los Illuminati de mayor categoría. Allí tenían privacidad, a la vez que podían contemplar los mapas y dar rienda suelta a su megalomanía. Cerraron la puerta y empezó una interesante conversación. Para no revelar identidades, les llamaremos simplemente “A” y “B”, sin decir quién era quién:
A: — Bueno, pues ya sólo quedamos tres.
B: — Sí, nosotros dos y el inútil ese.
A: — Mira, B. Yo lo he estado pensando y… esto de Verdes y Azules, Pueblo o Individualistas… no es más que es un jueguecito absurdo del Marder Club. En realidad, lo importante es que sobreviva un Illuminati. Lo importante es el Gran Plan.
B: — Ya. Yo estaba pensando que… lo que quiero es sobrevivir yo. No que ganen los Verdes, que estaría bien también, ya que yo por supuesto lo soy pero… ahora mismo, cada uno de los tres tenemos cada uno un tercio de probabilidades de sobrevivir. La gente nos ve como personas egoístas y superficiales, pero tú y yo sabemos que valemos mucho más. Estamos llenos de… ideas, de proyectos. No tendría sentido que sobreviviera… Ese.
A: — Vaya, pensaba que iba a costar más convencerte. Aunque creo que tus motivos son más egoístas que los míos.
B: — Llámalo como quieras. Creo que al final, llegamos al mismo destino por diferentes caminos.
A: — Bien, pues ahora tenemos que pensar cómo deshacernos del tercero y quedar nosotros dos solos. Yo había pensado que bisbis…bisbis…bisbis…
B: — Es un buen plan, pero…. Falta algo. Yo haría también bisbis…bisbis…bisbis…
A: — Muahahaha, qué bien pensado. Y ahora que lo dices... se me acaba de ocurrir que… ¿qué tal si además bisbis…bisbis…bisbis…?
B: — ¡Genial! ¿Tenemos un acuerdo?
A: — ¡Tenemos un acuerdo!
A la noche siguiente, el Marder Club estaba a rebosar.
Los camareros distribuían por las mesas cartones con los colores del semáforo para las votaciones: Rojo para votar por Agus, Amarillo para Lau y Verde para Theon.
Junto al escenario, habían colocado una caja fuerte y un tanque de agua vacío. El MC explicó las reglas del día:
— ¡Señoras y señores, meine Liebe Damen und Herren, Ladies and Gentlemen! ¡Bienvenidos a la Gran Final del Chechino! Hoy, casi con toda seguridad, se resolverá el misterio del Sepulturero. Hoy tenemos dos novedades para el linchamiento: la primera, como no tenemos ya agentes de policía adscritos al caso que puedan entrar en sus domicilios, los tres participantes han accedido a depositar en esta caja fuerte algunos documentos que sirvan como prueba de su identidad, que sólo serán abiertos después de su fallecimiento. La otra novedad: el linchamiento de hoy se hará ¡por inmersión! Vean este magnífico acuario, tiene una capacidad de 1.000 litros de agua. El linchado de hoy será introducido en el tanque, atado de pies y manos, y a continuación rellenaremos el acuario. Así que al menos ¡tendrá una mínima posibilidad de escapar! ¡Ahora, damas y caballeros, llenen esas copas! ¡Arriba el champán! ¡Hagan sus apuestas! El reloj nos indica que el linchamiento empieza en diez minutos. Y ahora, para entretenerles durante esta espera, primero el grupo musical "Comedian Harmonists" les ofrecerá un homenaje por el recientemente fallecido Pollus, y a continuación, nuestra magnífica bailarina y concursante chechinil, Lau Bu, les deleitará con su interpretación de una pieza de danza contemporánea llamada “Metrópolis”, inspirada en la reciente película cinematográfica de gran éxito:
La melodía de la canción de homenaje a Pollus, muchos años después, sería "tomada prestada" por el Premio Nobel de Literatura (pfff) Bob Dylan para su canción-protesta "Hurricane". El estribillo decía así:
This is the story of Mister Gerold Dayne
it won't be over till they clean his name
the press said he would profane
the body of his dead wife Madeleine
but this accusation is just insane
En la mesa número 1, la de mayor preferencia, se sentaban dos amigos de Theon: nuestra vieja conocida “Cory”, y su última conquista amorosa: Augustus von Thyssen Junior, el hijo menor del “Rockefeller del Ruhr”, creador del imperio Thyssen. Augustus era aún más crápula y disoluto que el joven Lobster, por lo que hacía la pareja perfecta de la princesa Corinna y era un gran amigo y compañero de juergas de Theon.
Mientras el público esperaba impaciente, viendo el interludio musical y de danza, unos pesados pasos sonaban en la parte trasera del Marder Club. El vigilante, de la empresa de seguridad privada “Antares Sicherheit GmbH”, se acercó extrañado a donde se oía el ruido.Lo que vió le heló la sangre:
— ¡Pollus! ¡Pero… pero cómo es posible! ¡Si estabas muerto!
— Tranquilo, no ha cambiado nada. Sigo muerto— contestó el interpelado, con una ligera ronquera, como si acabara de volver a hablar después de una prolongada afonía.
El guarda de seguridad se desmayó al oír aquello, lo que probablemente le salvó la vida. Pollus cogió una escalera, sacó su caja de herramientas y empezó a trastear con el mecanismo del gran reloj del escenario principal.
— ¡Muy bien, querido público! Después de este sentido homenaje a Pollus y el magnífico baile a cargo de Lau, ha llegado la hora de comenzar las votaciones. ¿Tienen ya claro quién es el nefando sepulturero? Voten, y voten en conciencia.
La mesa número 1 levantó dos cartones de color rojo. Los amigos de Theon habían emitido los dos primeros votos para condenar al trotskista Agus. Nada sorprendente. Pero… justo cuando sus votos habían sido contabilizados, sonó la campana del gran reloj. El MC se quedó bastante descolocado, consultó su reloj de pulsera y… vaya, parecía que aquello estaba bien.
— ¡Damas y caballeros! Les ofrezco mis más humildes disculpas, en mi nombre y en del Marder Club. La votación ha concluido. Lo siento, pero es así. El campanazo indica que se acaba de cumplir el final de la hora de votación. Así pues, el resultado del escrutinio queda como sigue: Agus Kerman 2, Lau 0, Theon von Lobster 0. Agus Kerman, ¡acaba de ganar usted un buen remojón!
Si aquello hubiese sucedido en cualquier otro país del mundo, habría sido de esperar un motín entre el público. Abucheos, gritos de “Fuera, Fuera…” Pero estamos en Alemania. Si las normas dicen que se ha terminado la votación, y una máquina como un reloj lo avala, pues no hay más que hablar. Sólo algunos tenues murmullos de protesta en algunas mesas indicaban que parte del público no estaba del todo conforme. Pero nadie interpeló al MC. Ni siquiera el perjudicado por la decisión… ya que Theon y Lau le habían tapado la boca al bueno de Agus con sendos esparadrapos en cuanto sonó el reloj.
Los operarios del Marder Club introdujeron a Agus Kerman en el tanque, colgándole cabeza abajo. Ahora tendría su mínima oportunidad de supervivencia si lograba escapar de aquello. Las mangueras y los cubos empezaron a llenar el gran depósito de agua. El trotskista se removía todo lo que podía, pero no lograba soltarse.
El nivel de líquido subía y subía… Agus se debatía desesperadamente, entre los gritos del público que le jaleaba, deseando que el espectáculo durase un poco más. Finalmente, el agua llenó por completo el tanque y a los cuarenta o cincuenta segundos, Agus murió ahogado.
—¡Y bien, damas y caballeros! ¡Ahora llega el momento de la verdad! ¿Habrán acertado ustedes… bueno, al menos, la mesa 1, con el linchamiento? ¡Abramos la caja fuerte! ¿Qué documentos nos ha dejado Agus Kerman como prueba de su rol?
El MC abrió la caja fuerte, extrajo una carpeta de color rojo, leyó rápidamente su contenido, y lo anunció al público:
—¡Bien, señoras y señores, el primer documento que dejó Agus Kerman es una carta, firmada por el dueño de este local, en la que le nombra liberado sindical vitalicio! A cambio, el Sr. Kerman se compromete a desactivar todas las reivindicaciones laborales de los trabajadores del Marder Club que puedan suponer un coste para la empresa, y a crear nuevas reivindicaciones absurdas para reconducir las peticiones sindicales a vías absurdas que no conduzcan más que al desánimo y la desmovilización de los trabajadores.
Vaaale, y el segundo y tercer documentos son carnets a nombre de Agus Kerman de dos organizaciones comunistas: una trotskista y otra ¡estalinista! ¡Quién lo iba a decir! Sí, aquí tiene su carnet de FORRO, “Fortaleza Roja” y aquí el de las Juventudes Estalinistas Trabajadoras de Alemania, “JETAS”.
Por si esto no bastara, hay también una instancia firmada por el propio Agus ante el Ministerio del Interior de Prusia, solicitando cambiar su apellido, del aristrocrático “VON Kerman” a “Kerman a secas”. Vaya, vaya, pues está claro que Agus Kerman era el Charlatán.
¡Damas y caballeros, qué drama, qué emoción! Hoy no ha sido la gran final, sino una semifinal. ¡Un fuerte aplauso para nuestros dos finalistas: Theon von Lobster III y Laaaaau Bu! ¡Quedan todos ustedes emplazados para la finalísima este domingo!
TURNO DE NOCHE
Por primera vez en mucho tiempo, una noche tranquila en el Marder Club. No pasó nada reseñable.
Re: Chechino 2.0 Reloaded
JUGADORES
Master: Bendar
1. Theon
2. Lau
3. Madelaf Detective
4. Pollus
Relojero
5. Sansalayne: Justiciera
6. Asha: Asesina
7. Agus: Charlatán
8. Aslan: Médico Residente
...
17. Ellaria
Stripper
Master: Bendar
1. Theon
2. Lau
3. Madelaf
Detective4. Pollus
Relojero5. Sansalayne: Justiciera
6. Asha: Asesina
7. Agus: Charlatán
8. Aslan: Médico Residente
...
17. Ellaria
StripperRe: Chechino 2.0 Reloaded
Muy bien, Chechillos y Chechinillas, la GRAN FINAL del CHECHINO será mañana domingo día 5 de abril a las 22:00 horas.
Cada voto será importante. Los fallecidos ya saben, no están obligados a intervenir, pero será mucho más divertido si lo hacéis.
Cada voto será importante. Los fallecidos ya saben, no están obligados a intervenir, pero será mucho más divertido si lo hacéis.
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